La recuperación dependerá de la cantidad de grasa extraída, del tipo de grasa y de la paciente. La grasa tarda unos 5 meses en compactarse y la piel hasta 8 en retraerse.
En tres-cuatro semanas se suele hacer vida normal.
Pautas generales:
● Medias de compresión, no excesivamente apretadas.
● Sesiones de drenaje línfático manual: 3 a 5 sesiones/semana durante al menos el primer mes.
● Empezar a caminar pronto y, en cuanto se curan las heridas, deportes de agua como natación o acuagym.
Es imprescindible acudir a médicos expertos en Lipedema y con un enfoque integral del tratamiento de esta patología.